Maga

Mentes superiores escapando de la gravedad, jugando con racionalidades como quién moldea plastilina.

Una mirada que calaba de fuera a dentro.
Una cabellera brillando, melodia silenciosa adornando el aire, tu seguridad tan lograda, como decorado de una telenovela.
Un caminar en llamas, lentos tus pasos, pretenciosas tus caderas.
Observando y recreándome en la forma exacta de tu belleza, a traves del cristal mirándo como quién observa un oasis salvaje de naturaleza.
Fue un verdadero placer romperte los esquemas, ser la pieza que completaba tu plan, y todo valió la pena pensaba, mientras besaba la cicatriz entre tus piernas.
Era una noche de verano.
Tus ojos parecían fuego, tal vez por lo que fumaste luego, y tan perfecto era tu cuerpo, calculado por algún genio, destinado para un juego temerario.
Fue un verdadero placer verte mirándome tan seria caminando de derecha a izquierda,
verte sonreir después por culpa de mi verborrea.
Y es que tú y yo, tú y yo, tú y yo tuvimos que ser locos amantes en nuestra vida anterior, solo eso explicaría la sincronía de tu cintura con la mía cuando hacíamos el amor.
Y es que tú y yo loca, tuvimos que ser amantes en una vida anterior, solo eso explicaría la simetría de encontrarnos un buen día y con la piel hablarnos de amor.

Diosas mágicas y diabólicas jugando a ser simples, tangibles, humanas y mortales.